lunes, 13 de febrero de 2012

Se me fue de las manos...

¿Sabes cuándo lo supe? Cuando de siete días que tiene la semana, yo te quería ocho... Empecé a sospechar que tenía un problema. Pero, que haga dos semanas que no estés en mi cama y yo siga oliendo a ti... Ya no tiene precio. Y creo que no, que ya no hay vuelta atrás... Que mientras tú estás ahí, dale que te pego con las demás... Yo todavía te deseo más y más. Te quiero y me parece que esto es de verdad... Que se me fue de las manos, que ya no tengo remedio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario